viernes, 3 de enero de 2014

DOUG SAHM AND BAND


Tal vez digáis que soy un romántico o, peor aún, un ingenuo mientras afirmo sin ruborizarme que creo en el poder curativo de la música; bien, vale, dejémoslo en paliativo pero ni el mayor de los cínicos podrá negar la capacidad que ésta tiene de transportar al oyente a otro lugar, puede incluso que a otro tiempo, acercándole colores, aromas y -claro- sonidos que durante unos minutos al menos le harán dudar del espacio físico que ocupaba antes de que esas primeras notas comenzaran su ritual danza. Las doce canciones que componen el debut en solitario, auspiciado por Jerry Wexler, del exlíder del Sir Douglas Quintet son ni más ni menos que doce postales con la capacidad de traernos el eco de El Paso y la polvorienta tierra de la frontera con México, de acercarnos los olores de Nueva Orleans y empaparnos con el húmedo calor de Memphis para después dejar que nos cale el frío viento de Chicago o el agua que recorre el Misisipi. 

Editado en un año (1973) donde Dark Side Of The Moon y Larks' Tongues In Aspic convivían con Raw Power y Berlin, un grupo de amigos que resulta que también eran músicos (dejemos de lado el nombre de los ilustres invitados para dejar que sea el potencial -y desprevenido- oyente el que los descubra por sí mismo) se juntaron bajo el techo de un estudio para montar una fiesta que resulta que también era una sesión de grabación. Una fiesta donde nos imaginamos a sus asistentes alquilando los instrumentos en una casa de empeños antes de entrar a grabar, donde no importa si se me oye más a tí que a mí, si me equivoqué en una nota o si la canción la escribiste tú o yo porque resulta que en Doug Sahm And Band manda el amor por la música, manda el corazón y como uno es un romántico o, peor aún, un ingenuo resulta que eso nos encanta.


9 comentarios:

  1. En parte te entiendo, Agente, aunque no sea (o haya dejado de ser) lo que se dice un romántico. Me pongo a la de ya con este disco, y recuerdo que tan ilustre año vio también cómo debutaban los New York Dolls, Lynyrd Skynyrd y Aerosmith, ahí es nada.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sabía yo que me pondrías pegas, soy incapaz de "ablandarte" ni siquiera un poco jejeje Al menos que la entrada sirva para acercarte esta joyita.
      Enorme ese año 1973, Gonzalo. Abrazos.

      Eliminar
  2. Me encanta este disco, especialmente temas como "(Is anybody Going To) San Antone" o el "Blues Stay Away From Me", por citar solo unos pocos. ¡Que ambientazo se debía respirar en las grabaciones!, y que elenco de participantes, ¡sublime!. Una joya. Curioso en la foto cómo el único que se "atreve" a pasar el brazo por el cuello del estirado Dr. John sea el "Flaco" Jiménez.
    Saludos,
    JdG

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Citas dos de los mejores temas del disco aunque con ese elenco y el ambiente que se debió respirar ahí como para que el resultado no fuera bueno!

      Un saludo, JdG.

      Eliminar
  3. No te lo creeras pero llevo todo lo que va de 2014 sin dejar de escuchar al inolvidable Doug, en especial estoy un poco "obsesionado" con Groover's Pradise, el siguiente a este y parecidos de buenos no, buenísimos, el año de Band on The Run y Tubular Bells, por aportar...
    Abrazo a los tres.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sincronía, Addison! "Groover's paradise" no lo escuché, me lo apunto. Podríamos estar todo el día citando grandes discos editados ese año.
      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Comparto tu romanticismo, discazo absoluto.
    No conozco "Groover's Paradise" pero sí tengo "Texas Rock for Country Rollers" y "Hell of A Spell" y son bastante buenos, aunque no llegan al nivelazo de este.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al menos alguien me comprende jajaja. En Doug Sahm And Band no sobra nada.
      Gracias por comentar, Alex R y un saludo.

      Eliminar
  5. Adquirí el LP en unas de aquellas rebajas de la época en la que era un placer recorrer las estanterías de El Corte Inglés o de Galerías Preciados en Enero o en Julio. Hablo de un tiempo en el que para escuchar música poco popular, había que comprarla y solo aquellos saldos facilitaban la labor. Así descubrí a Doug Sahm y gran parte de la obra de Kinks, Spencer Davis Group, Everly Brothers, J.J. Cale, ... Qué tiempos para los que los vivimos!. Ahora, gracias a páginas como esta, hemos ido descubriendo lo que verdaderamente había detrás de algunos mitos.

    ResponderEliminar